Aunque en los países del Mediterráneo las vemos como una plaga, las medusas (al menos, algunas especies) son consideradas un manjar por la cocina oriental: China, Japón, Corea, Tailandia, India, Indonesia y Malasia son grandes consumidores de estos cnidarios, en guisos o en ensaladas. Se come sólo la umbrela (la cabeza), que se deja secar hasta que toma un color amarillo traslúcido. Luego se corta en tiras, que se sirven en diferentes maceraciones y salsas. Algo muy conveniente, porque no tienen demasiado sabor. De momento, en nuestro país, sería cuanto menos raro encontrarnos medusas en la carta de cualquier chiringuito de playa.