martes, 15 de mayo de 2012

Jeroglíficos inéditos muestran que, para los mayas, el mundo no acababa en 2012



Un equipo de arqueólogos estadounidenses ha encontrado los calendarios astronómicos mayas más antiguos de los que se tiene constancia grabados en piedra en las paredes de un edificio en Xultún (Guatemala), según publica hoy la revista Science. Los jeroglíficos datan del siglo IX, lo que implica que son varios siglos más antiguos que los Códices Mayas, registrados en libros de 1300 a 1521. Y representan cifras de cálculos ligados a las fases lunares, un calendario ceremonial de 260 días, un calendario solar de 365 días, y cálculos con los ciclos anuales de los planetas Marte (780 días), Venus (584 días) y Mercurio, según ha explicado el arqueólogo William Saturno, de la Universidad de Boston (EE UU), que dirigió la expedición y excavación. Según el investigador, “parece un episodio de televisión de la serie Big Bang Theory, un problema matemático geek que los mayas pintaron en la pared, que usaban como si fuera una pizarra”. En los muros también aparecen hombres ataviados con uniformes negros y con una medalla colgada alrededor de sus cuellos. De hecho, el mural es la primera muestra de arte maya encontrada en las paredes de un edificio. La vegetación mantuvo cubiertos los yacimientos hasta 2010, cuando un estudiante discípulo de William Saturno la destapó. En aquel momento se organizó una exploración, que patrocinó la National Geographic Society. "Por primera vez hemos podido ver las anotaciones un escriba, cuyo trabajo era el de guardar los datos en la comunidad maya", explica Saturno. Los grabados muestran que, contrariamente a las creencias populares, no hay ningún indicio de que el fin del mundo coincidirá con el fin del año 2012, añade el científico. "Los antiguos mayas predijeron que el mundo continuará y que en 7000 años las cosas serán exactamente cómo eran entonces", concluye.