A partir de una prueba de dibujo muy simple se puede predecir la probabilidad que tiene un sujeto de sufrir un infarto cerebral o ictus, según revela una investigación realizada por neurólogos suecos de la Universidad de Uppsala y publicada en la revista médica BMJ Open. Estudiando a mil varones que no habían sido diagnosticados nunca de infarto cerebral, con una capacidad intelectual normal y edades comprendidas entre 65 y 75 años, los investigadores comprobaron que el riesgo de sufrir este trastorno se podía predecir usando una prueba de trazado (TMT por las siglas en inglés de Trail-Making Test), que consiste en dibujar líneas que unen números o letras en orden ascendente, lo más rápido posible. En concreto, un seguimiento a los sujetos durante más de una década permitió demostrar que aquellos con peores resultados en el test de dibujo tenían tres veces más posibilidades de sufrir un accidente cerebrovascular. Para los científicos responsables de la investigación, esta técnica predictiva ofrece mayor nivel de precisión que las pruebas que se aplican en la actualidad, con la ventaja adicional de que es de bajo costo. Es más, el TMT podría sacar a la luz discapacidades cognitivas causadas por enfermedades cerebrovasculares silentes que aún no han producido síntomas visibles en los pacientes. El infarto cerebral es una de las principales causas de discapacidad, especialmente en personas de edad avanzada. Un accidente cerebrovascular sucede cuando el flujo de sangre a una zona del cerebro se interrumpe. Si el flujo se detiene durante más de unos pocos segundos, el cerebro no puede recibir sangre ni oxígeno y las neuronas mueren, causando daño permanente en forma de parálisis, pérdida de sensibilidad, problemas para comunicarse, ceguera, demencia, o incluso la muerte.